antes
en días que me viene
penumbra
absorto crepúsculo
prefería ni abrir
el cuaderno
y desplumar
pensamientos.
ahora
¿qué mas dará?
lo abro y me siento
enfrentado a él
remangado
introduzco dedos
en garganta
vomitando disparates
mísero equipaje
sin miedo
ajeno.